En una jungla de Zimbabue, la cría de un elefante cayó de espaldas en un charco. La madre elefante hizo todo lo posible para ayudar a su bebé elefante a levantarse, pero no pudo. El bebé elefante seguía perdiendo su fuerza y los leones comenzaron a rondar en torno a ellos, esperando que la madre elefante se cansara.
En ese momento, algunos otros elefantes que vieron lo que estaba sucediendo comenzaron a reunirse a su alrededor. Algunos de ellos trabajaban juntos para ayudar al bebé elefante a levantarse, y el resto bloqueaba el camino para mantener alejados a los leones. Dado que incluso los elefantes bebés pesan mucho y los elefantes usan sus trompas como sus manos en lugar de usar sus patas delanteras, no fue fácil ni siquiera para varios elefantes adultos ayudar al bebé elefante a levantarse. Sin embargo, siguieron intentándolo sin darse por vencidos. Cuando uno de ellos cogió la pata delantera del bebé elefante, usando su trompa, y lo ayudó a sentarse, y luego empujó su espalda usando su pata, el bebé elefante finalmente pudo volver a levantarse. Podría haberse convertido en comida para los leones, pero pudo salir del charco de manera segura.
Todos sabemos que los elefantes son los animales más grandes de la tierra. No obstante, aunque sean muy fuertes, es difícil que sobrevivan solos en la naturaleza. ¿Acaso no se vuelven aún más fuertes debido a su comportamiento altruista de ayudar a sus compañeros elefantes en peligro sin dudarlo?