
Cuando usted ve un cojín, desea apoyarse en él. Y cuando lo hace, se siente suave y cómodo. En las palabras también existen “palabras cojín” que hacen que los oyentes estén satisfechos y cómodos. Antes de pedir a alguien que haga algo, si usted le dice palabras como “disculpe”, “lamento molestarlo”, “me temo que”, o “si no le importa”, se deshará de sentimientos desagradables y hará que se sienta respetado. Trate de no olvidarse de usar estas palabras cojín, ya que incluso pueden convertir palabras duras en palabras suaves.
- Referencias
- Ejemplos de palabras cojín
- “Lo siento, ¿pero podrías ayudar a mamá (papá)?”
- “Cariño, sé que estás ocupado, ¿pero podrías hacerme un favor?”
- “Lo siento, pero me sorprendió en un mal momento.”
- “Si no le importa, ¿podría preguntarle una vez más?”
- “Disculpe, ¿puedo entrar?”
- “Lo lamento, ¿podría repetírmelo?”