Agradable y placentero servicio voluntario
Melissa Hutchins, desde Baltimore, MD, EE. UU.
Recibiendo el fin de año, la iglesia de Baltimore visitó el Asilo de Ancianos Sunrise of Silver Spring a fin de animar a los ancianos, representando diversas canciones y bailes.
Durante nuestra representación, muchos de los residentes aplaudían, golpeaban ligeramente los pies y cantaban con nosotros. Un residente incluso se puso de pie y bailó con una amplia sonrisa, de la mano de uno de nuestros miembros. Los ancianos nos agradecieron por la visita y nos preguntaron cuándo vendríamos de nuevo. Todos sonreímos alegremente y prometimos regresar pronto. Fue divertido y realmente deseamos volver a visitarlos.
Nunca antes había sentido esa auténtica felicidad cuando visitaba un centro de ancianos una vez al mes con otra organización antes de unirme a la Iglesia de Dios. Para ser honesta, solía sentirme intimidada por hacerlo, tratando de buscar pretextos para no ir, como tener bastantes tareas. Iba solamente por la exhortación de mi mamá. Las visitas siempre eran tristes.
Sin embargo, una vez que empecé a realizar eventos de servicio voluntario en asilos de ancianos como miembro de la Iglesia de Dios, ya no lo sentía como una obligación dolorosa. Fue agradable y placentero porque Dios sembró esperanza y amor en mi corazón. Espero continuar participando activamente en eventos futuros para compartir con el mundo el verdadero amor y gozo que he recibido de Dios.