
La felicidad puede pasar como una suave brisa; está en un momento y luego desaparece. Pero cuando la sentimos una y otra vez, comienza a quedarse con nosotros. ¿Y si la vamos guardando poco a poco para que perdure más tiempo en nuestros corazones? Llamémosla Cuenta de Felicidad.
Puede realizar depósitos en su propia Cuenta de Felicidad a través de la gratitud o bien ayudar a llenar el vacío de alguien más ofreciéndole palabras amables y acciones consideradas que le levanten el ánimo. Cuando las familias se unen, la felicidad crece con los intereses, al igual que los ahorros con intereses compuestos.
Este mes, intente llenar su propia Cuenta de Felicidad, y la de su familia, poco a poco. Un fuerte equilibrio de felicidad podría ser la mayor riqueza de la vida.
- Consejos
- Cómo usar la Cuenta de Felicidad
- Haga depósitos con gratitud, expresiones amorosas, consideración, cumplidos, amabilidad, concesión, paciencia y ánimo.
- Tenga cuidado al hacer retiros acompañados de quejas, críticas, regaños, órdenes o culpas.
- Si retira más de lo que deposita, su cuenta podría quedar en saldo negativo.
- Es mejor hacer depósitos pequeños y constantes que grandes de una sola vez.
- Hable con sus seres queridos sobre cómo está su Cuenta de Felicidad.