Instrucciones claras

4,111 visualizaciones

Hwang Hui fue uno de los primeros ministros más célebres de la dinastía Chosun de Corea. Él tenía tres hijos, pero uno de ellos era una vergüenza. Cada vez que su hijo salía, volvía ebrio y muy de noche. Hwang Hui sufría mucho por él. Un día, Hwang Hui salió y recibió a su hijo cortésmente, vistiendo sus atuendos oficiales.

—¡Buenas noches!

Sorprendido, su hijo le pidió a su padre que no actuara así.

—Padre, ¿por qué está haciendo esto?

Hwang Hui respondió:

—Si un hijo no escucha a su padre, entonces no pertenece a la familia. Simplemente es un invitado, no un hijo. Así que estoy saludando cortésmente al invitado que visita mi hogar.

Al escuchar a su padre decir eso, el hijo se arrepintió de sus malas obras y prometió no volver a su vida pródiga.