En Tailandia, que tiene un clima tropical, la temperatura media anual es de 28 ℃. Sin embargo, en diciembre de 2019, las temperaturas en toda Tailandia descendieron debido a la alta presión atmosférica de China. En algunas partes del país, la temperatura cayó por debajo de los 10 ℃ debido al fuerte viento.
Este frío repentino golpeó sin excepción la casa de un padre (38) de dos hijas en una aldea de la provincia de Bueng Kan, en el nordeste de Tailandia. Como la casa estaba en construcción, aún no había puertas ni ventanas, lo que dejaba pasar el viento frío. El padre dio todas las mantas a sus hijas y durmió en una estera delgada. No tenía prendas adecuadas, por lo que vestía una camisa y unos pantalones cortos. Su hija de ocho años colocó una de las mantas sobre su padre, acurrucado por el frío, cuando se despertó en medio de la noche.
No obstante, él no se despertó a la mañana siguiente. El padre, que no tenía problemas médicos, murió de hipotermia. Las mantas con las que abrigó a sus hijas en la noche, no eran solo mantas, sino que podrían haber sido el mejor amor que podía dar como padre.