Donación de fondos de ayuda de emergencia en casos de desastre por la erupción volcánica en Tonga
Entregando el amor de la Madre a Tonga que sufre de erupciones volcánicas, maremotos y sequías
Tonga
En enero de 2022, un volcán submarino hizo erupción cerca de la isla Hunga Tonga y cubrió todo el país de Tonga con ceniza volcánica. Las ondas de choque de la explosión provocaron tres grandes olas, que dañaron o destruyeron unos 470 hogares. Los residentes que perdieron sus casas en un instante ya no pudieron seguir usando el agua de lluvia como agua potable, debido a la gruesa capa de cenizas volcánicas. Además, debido al prolongado fenómeno de El Niño, se produjeron severas sequías, lo cual agravó la situación.

El 20 de septiembre, la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial donó 83 000 dólares tonganos (aprox. 40 000 dólares estadounidenses) al Gobierno de Tonga para ayudar a los damnificados que estaban sufriendo grandes daños por la erupción volcánica. Alrededor de las 10 a. m., unas treinta personas, entre funcionarios de Tonga y miembros de la Iglesia de Dios de Nueva Zelanda y Tonga, asistieron a la ceremonia de donación de fondos llevada a cabo en el nuevo edificio del Ministerio de Meteorología, Energía, Información, Gestión de Desastres, Medio Ambiente, Comunicaciones y Cambio Climático de Tonga (MEIDECC).
Paula Ma’U, directora ejecutiva del MEIDECC, declaró: “Estoy muy agradecida con la Iglesia de Dios por las donaciones y espero continuar trabajando con ellos”. Tesimoni Taufateau, director del Centro de Operaciones de Emergencia Nacional, expresó su gratitud por la donación realizada en tiempos difíciles: “Estamos brindando agua doméstica al purificar el agua de mar a través de la ayuda extranjera por la falta de agua debido a los daños por maremotos, erupciones volcánicas y sequías”. La donación se enviará a varias partes de la isla y se utilizará para suministrar agua, electricidad y combustible.
Los miembros que participaron en la ceremonia de donación dijeron que estaban felices de compartir el cálido amor de la Madre con su prójimo a través de la ayuda y que deseaban que se usara para reconstruir muchos lugares destruidos por el maremoto. El 21 de enero, justo después de la erupción del volcán Hunga Tonga-Hunga Haʻapai, la Iglesia de Dios ayudó a los damnificados a recuperar rápidamente su rutina diaria, brindándoles artículos de primera necesidad como agua potable, mascarillas y comestibles para recuperarse de los daños.