Si no puede detener el tiempo, ¡disfrútelo!
Si su cuerpo no envejeciera, a pesar de su edad, ¿sería una bendición? La bendición es que su mente madura, aunque su cuerpo envejece.

Cada vez que llegamos al final del año, escuchamos a la gente quejarse: “Voy a envejecer un año más”. Todos desean vivir mucho tiempo, pero no quieren envejecer. No es agradable envejecer, porque envejecer significa perder fuerza física y tener menos tiempo de vida.
Cuando transcurren 365 días, el tiempo que tarda la Tierra en girar alrededor del Sol una vez, avanzamos en edad un año y envejecemos físicamente. Simplemente estamos montando la Tierra que gira como una peonza, pero nuestros cuerpos envejecen, lo cual es algo interesante en cierto modo. Hay muchas teorías sobre la causa del envejecimiento. La teoría del desgaste propone que algunas de las células del cuerpo se desgastan y deterioran con el tiempo y la división celular finalmente se detiene. La teoría de la regulación génica propone que el proceso de envejecimiento, desde el nacimiento hasta ese punto, está programado en el ADN humano, y la hipótesis neurohormonal explica que la secreción de ciertas hormonas en el cuerpo disminuye y debilita las funciones del cuerpo. Sin embargo, la razón exacta aún no se ha descubierto.
Cuando las personas son jóvenes, piensan que su juventud durará eternamente. Parece que el envejecimiento no tiene nada que ver con ellos. No pueden identificarse con las personas mayores que dicen que sus dientes no son lo suficientemente fuertes para masticar la carne, o sus estómagos son demasiado débiles para comer algo picante o salado, o que les duelen las articulaciones cuando está nublado. Sin embargo, el tiempo fluye constantemente y todo envejece. Este es nuestro destino que no podemos evitar.
¿Cómo aceptar el envejecimiento?
Había un programa de televisión para viajar al futuro y vivir un día virtual. Durante la emisión, los participantes quedaban impactados en el momento en que se veían maquillados como ancianos. Arrugas profundas, manchas de la edad, canas… Algún día tendrán esos rostros, pero no podían aceptarlo fácilmente.
Un sitio web de empleos preguntó a 1251 personas de 20 años a más: “¿Cuándo siente que está envejeciendo?”. Las respuestas del segundo al quinto lugar fueron: “Cuando no entiendo neologismos” (40 %), “Cuando extraño ser estudiante de secundaria” (28,6 %), “Cuando necesito un momento para recordar mi edad” (21 %), “Cuando me miro en el espejo” (20,3 %), y el primer lugar fue: “Cuando sigo sintiéndome cansado, sin importar cuánto haya descansado” (51,4 %).
De esta manera, cuando las personas envejecen, su apariencia cambia y su fuerza física tampoco es como antes. Muchas personas toman sin dudar medicamentos o se someten a cirugías para evitar envejecer. El fenómeno en el que las personas se obsesionan excesivamente con su apariencia física y juventud se llama Síndrome de Dorian Gray. Se derivó de la novela El retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde, la historia de Dorian que envidia mucho su propio retrato, que nunca envejece, y que finalmente muere, impulsado por el deseo maligno de la juventud física.
En la era de los centenarios, los expertos señalan que debemos cambiar el concepto de personas mayores para envejecer de manera saludable. Lo que sugieren es que debemos asumir el envejecimiento no como una carga pesada, sino como un importante regalo de la vida que necesitamos para ser pioneros.

Su rostro es uno joven y fresco, pero un rostro con rastros del tiempo también lo es. Las hojas verdes y frescas en verano se ven muy bien, pero las hojas rojizas de otoño también tienen su propia belleza. ¿Quién cree que tiene mejor salud y felicidad, alguien que ni siquiera puede reírse adecuadamente, preocupándose por las arrugas en torno a los ojos, o alguien que piensa: “Voy a reír mucho, porque tener arrugas es algo natural cuando se envejece”? Como la expresión: “Si no puede evitarlo, disfrútelo”, si no puede detener el tiempo, acéptelo con alegría.
Las personas con sueños no envejecen
Un doctor que llevó una vida exitosa y se retiró con orgullo a la edad de 65 años, derramó lágrimas de pesar al cumplir 95 años, 30 años después de su jubilación. Es porque pasó esos 30 años sin sentido, pensando: “He vivido bien. El resto de mi vida es solo una bonificación”. Esos 30 años posteriores a la jubilación fueron un tercio de sus 95 años de vida. Este doctor, que se arrepintió profundamente, decidió estudiar un idioma extranjero para no tener que lamentarse diez años después, en su 105.º cumpleaños.
De acuerdo con las etapas de la vida que la ONU ha redefinido recientemente, la vejez se inicia a partir de los 80 años, y la adultez madura abarca de los 66 a los 79 años, y la adultez temprana de los 18 a los 65 años. Esto significa que, aunque alguien se retire a la edad de 65 años, tienen un largo camino por recorrer hasta llegar a la vejez. El psicoterapeuta austriaco Adler explicó que aquellos que son excesivamente conscientes de que han envejecido, están propensos a subestimarse y tener un sentido de inferioridad. La confianza de pensar: “¿Qué hay de malo con mi edad?”, es mucho mejor que desesperarse y cavilar: “¿Qué voy a hacer a mi edad?”.
Hay una expresión: “La edad es solo un número”. En efecto, algunas personas irradian tanto entusiasmo como los jóvenes. Kim Myeong-jun escaló con éxito las Siete Cumbres a la edad de 63 años; Harland Sanders comenzó el negocio de Kentucky Fried Chicken cuando tenía más de 60 años y tuvo un gran éxito; Ronald Reagan fue elegido presidente a los 69 años; y John Milton escribió un poema épico inmortal llamado Paradise Lost a la edad de 59 años, cuando era ciego; y Warren Buffett, a sus 80 años, sigue activo como un legendario inversionista.
Alguien dijo que el momento en que uno pierde su sueño es el momento en que envejece. Dado que el traje y las palabras que no se adecúan a la edad, hacen que la gente frunza el ceño, no podemos ignorar completamente la edad; sin embargo, no existe la edad para tener un sueño. Pablo, llamado apóstol de los apóstoles, dijo: “Aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día”. Hoy es cuando somos más jóvenes por el resto de nuestra vida. Tenemos el hoy todos los días. Persigamos nuestros sueños hoy.
Madurando al envejecer
Cuando uno envejece, parece que se pierden muchas cosas, pero también hay muchos puntos buenos. Esas cosas no son solo las que la gente dice en broma: “Puedo conseguir más beneficios de la seguridad social”, “Me siento menos tímido” o “No me veo obligado a conseguir un seguro”.

Algo bueno sobre el envejecimiento es que se siente tranquilo y que obtiene más años de experiencia. Aunque su vista se deteriore, los ojos de la mente se iluminan. A menudo se escucha que las personas que de jóvenes se impacientaban, se enojaban o se desanimaban incluso por asuntos triviales, se vuelven más pacientes y generosas cuando envejecen. Además, se dice que las personas mayores manejan las situaciones difíciles de manera positiva y sin entrar en pánico.
Hay un proverbio africano que dice: “Cuando un anciano muere, es como una biblioteca que se quema hasta los cimientos”, y un refrán chino versa: “Un caballo viejo conoce el camino”. Significa que las experiencias y la sabiduría que un anciano aprendió durante muchos años, son muy preciosas. Así como la comida instantánea no puede imitar el intenso sabor de la comida que se cocina o fermenta durante mucho tiempo, la sabiduría y la experiencia de una persona mayor no son comparables con las de una persona joven.
Sin embargo, no significa que la sabiduría y las experiencias se acumulen solo porque uno envejece. Si intenta hacer que los demás lo sirvan solo porque es mayor o insiste en sus propias opiniones, considerando solamente sus experiencias, se convertirá en una persona mezquina que no puede llevarse bien con la gente que lo rodea. Cuando trata a los demás con tolerancia y consideración, y se examina a sí mismo, estando siempre listo para aprender, su visión del mundo se profundizará y se convertirá en una persona virtuosa que también pueda comunicarse con otras generaciones.
Confucio dijo: “A los 40, no tenía delirios por las cosas del mundo; a los 50, conocí el mandato del cielo; a los 60, mi oído estaba en sintonía para entender todas las palabras de los demás; a los 70 años, seguí el deseo de mi corazón sin sobrepasar los límites del derecho”. Así como todos los granos maduran, soportando fuertes vientos y un calor abrasador, para las personas que llenan su interior, siendo refinadas en las tormentas del mundo, “madurar” es una expresión más adecuada que “envejecer”.
La gente dice que el tiempo viaja a la velocidad de 10 km/h en la adolescencia, a 30 km/h a los 30 años, y a 50 km/h a los 50 años. Algunos afirman que es como cuando tenemos menos jugo en un vaso, parece que se agotará más rápido; y otros aseguran que el tiempo se siente más corto para las personas mayores porque un año para una persona de 50 años es solo la quincuagésima parte de la vida, mientras que para un niño de siete años es la séptima parte.
Al mirar atrás, la vida es como un sueño corto. Envejecer es algo que nadie puede evitar. Lo importante es “cómo envejece”. Mientras respiramos y vivimos, no hay tiempo que podamos pasar sin sentido. No hay tiempo adicional dado en la cumbre de nuestra vida. ¿Se marchitará lamentando su envejecimiento o madurará más día tras día? Depende totalmente de usted.