
La isla de Kauai en el archipiélago de Hawái es ahora famosa por su hermoso paisaje, pero una vez fue una tierra sombría y oscura. Los residentes sufrían de pobreza y enfermedades, y los criminales, alcohólicos y delincuentes juveniles eran problemas serios.
En 1954, se realizó una encuesta sobre cómo los antecedentes familiares y el entorno socioeconómico afectaban el desarrollo de la gente allí. Los expertos en cada campo observaron a unos 800 residentes desde el momento en que eran fetos hasta la adultez, y descubrieron que cuanto peor era su entorno de vida debido a las carencias en carácter y salud mental de los padres y demás, tanto más difícil les resultaba adaptarse a la sociedad, llevando una vida mal orientada.
Sin embargo, entre 201 residentes en el grupo de alto riesgo con las peores condiciones de vida, asombrosamente 72 crecieron correctamente sin mostrar ningún problema de aprendizaje ni de adaptación social; algunos de ellos incluso ingresaron en prestigiosas universidades de los Estados Unidos, obteniendo becas. Tras el análisis, se observó algo en común: cada una de esas personas tenía al menos una persona de confianza y que los entendía, ya fuera su progenitor, su pariente o su maestro. Pudieron superar las pruebas con el poder del amor incluso en medio de condiciones adversas.
Es importante crear un buen ambiente para su hijo, pero lo más importante es darle confianza, entenderlo y amarlo.