Robert Marchand, conocido como la leyenda viviente de los ciclistas de edad avanzada, nació en Francia en 1911 y pasó por dos guerras mundiales. Para ganarse la vida, saltó de trabajo en trabajo como bombero, conductor de camión, leñador, etc. A los 68 años, comenzó a soñar con convertirse en ciclista.
Para lograr su objetivo, Robert Marchand disfrutó comiendo frutas y verduras y practicó durante una hora todos los días. Incluso se aseguró de llevar una vida muy controlada yendo a la cama a las 9 p. m. y despertándose a las 6 a. m. En 2017, salió a competir en bicicleta a la edad de 105 años y estableció una nueva marca mundial en su grupo etario. Cuando un periodista le preguntó cómo se sentía sobre el ciclismo, Robert respondió:
“No estoy aquí para ser campeón. Estoy aquí para demostrar que a los 105 años todavía se puede montar en bicicleta”.