Servicios de remoción de nieve en Corea
Para que los residentes locales pasen el invierno con seguridad
Corea del Sur
En medio de tormentas de nieve sorpresa en diversos lugares de Corea, la ola de frío del Ártico echó sal a la herida el 6 de enero. La acumulación y congelamiento de las capas de nieve produjeron una serie de daños, como la congestión del tráfico de personas yendo y regresando del trabajo, el congelamiento y la explosión de los medidores de agua y enfermedades relacionadas con el frío. En algunas áreas de Chungnam y Jeonbug, se produjeron muchos daños en los cultivos y el ganado. Y el 9 de enero, las fuertes nevadas en la montaña Hallasan ocasionaron que el espesor de las capas de nieve fuera de 136,3 cm en su punto más alto en la provincia autónoma especial de Jeju, donde se emitió una advertencia de ola de frío por primera vez en 57 años; la mayoría de las aeronaves y aviones suspendieron sus operaciones.
Los miembros de la Iglesia de Dios de unas 140 zonas, incluyendo Seúl, Incheon, Seongnam y Jeonju, llevaron a cabo servicios de remoción de nieve desde el 7 de enero, con la esperanza de que su prójimo pasara el invierno en condiciones seguras. A pesar de las olas de frío, tomaron palas y escobas y quitaron la nieve en áreas residenciales, colinas y carreteras cercanas a las escuelas primarias donde era probable que ocurrieran accidentes por negligencia y congestión de tráfico y calles heladas, mientras se cumplían estrictamente las pautas de prevención contra la COVID-19. Sacaron la nieve que se amontonó durante la noche, rompieron la dura corteza de nieve congelada debido al clima helado y la sombra, y terminaron esparciendo cloruro de calcio sobre el suelo helado.
Lee Sang-hui, líder del centro de servicio comunitario vecinal en Nakseongdaedong, Seúl, expresó su gratitud a los miembros: “Tuvimos muchas dificultades para quitar la nieve. Gracias a su ayuda, pudimos terminar rápidamente de quitar la nieve en carreteras inclinadas donde los automóviles tenían dificultades para pasar”.