Roberto Clemente fue el bateador principal de los Piratas de Pittsburgh en la Liga Mayor de Béisbol cerca de veinte años. Frecuentemente donaba equipamiento de béisbol y comida para niños indigentes de su país de origen, Puerto Rico, y de Centroamérica.
El 23 de diciembre de 1972, cuando un gran terremoto golpeó Nicaragua en Centroamérica, Roberto envió en dos ocasiones suministros de socorro para las víctimas. Cuando oyó que los funcionarios locales estaban hurtando los suministros de socorro, cargó más de dos toneladas de suministros dentro de un avión y él mismo se dirigió al área afectada. Desafortunadamente, el viejo avión cargado con muchas cosas explotó en cuanto despegó.
La Liga Mayor de Béisbol promulgó el “Premio Roberto Clemente” para honrar sus actividades caritativas y presentó este premio a los jugadores que contribuyeron a la sociedad con servicios voluntarios.
“Cada vez que tienes la oportunidad de hacer la diferencia en este mundo y no lo haces, estás malgastando tu tiempo en la Tierra. Quiero ser recordado como un jugador que dio todo lo que tenía para dar.”
Como dijo en su vida, la gente lo recuerda como alguien que dio todo lo que pudo dar. Las personas recuerdan sus obras más bellas que las de cualquiera.