La duración de vida dada por los padres

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Ahora la sociedad longeva es inminente, y surgen muchos reportes de noticias sobre la salud y la longevidad: los secretos de la longevidad de las personas que figuran en el Libro Guinness de los récords por vivir más de 120 años, los pueblos longevos alrededor del mundo y la muestra detallada de su estilo de vida, y un reciente caso en Japón del perro más longevo del mundo que murió a los 26 años.

¿Por qué vivir una vida más larga que los demás atrae la atención de la gente? Es debido al deseo común de la humanidad de vivir una larga vida. Esto demuestra que la vida es un tema misterioso que ni siquiera la ciencia ha resuelto a pesar del notable desarrollo de la civilización.

La vida es algo que cualquiera puede sentir fácilmente, pero es muy difícil definirla. La vida es un atributo común de un ser viviente mientras está vivo, y generalmente se define por diversas características tales como el metabolismo1, la regeneración y el crecimiento. Sin embargo, es difícil decir que está completamente definida científicamente, porque la vida es una combinación de diversos campos científicos como la fisiología, la física, la bioquímica y la biología molecular, y los fenómenos vitales no pueden verse solo en un aspecto. Es por eso que los diccionarios incluyen una explicación subsidiaria: “Período entre el nacimiento y la muerte”. La característica más distintiva de la vida es que es limitada, tiene un principio y un fin.

1) El metabolismo es todo proceso químico que se produce dentro de un organismo vivo con el fin de mantener la vida, tales como la digestión, la respiración y la fotosíntesis.

Entonces, ¿cómo se determina el límite de la vida? Se sabe que cada especie animal tiene su propia duración de vida, un tiempo limitado de vida. La efímera, el insecto conocido por tener la vida más corta, vive de unas pocas horas a unos días después de convertirse en imago. Los hámsteres viven cerca de dos años, los perros de doce a dieciséis años, las vacas unos veinte años, los elefantes de sesenta a setenta años y las tortugas más de doscientos años. A pesar de que viven en ambientes y condiciones ecológicas similares, existen diferencias significativas en su expectativa de vida, dependiendo de la especie. La razón es que hay diferencias genéticas que determinan la duración de la vida. A través de la herencia, se transmiten los rasgos y las características de padres a descendientes, como dice un refrán: “De una cebolla no nace una rosa”.

Es natural y común que un niño se asemeje a sus padres. Pero no ha pasado mucho tiempo desde que el mundo descubrió que el secreto estaba en el ADN de las células. Los genes, que controlan las características biológicas de los padres2, se transmiten a la siguiente generación a través de las células reproductivas (espermatozoide u óvulo). Debido a que los animales también heredan los genes de sus padres, es imposible que un gato dé a luz a un perro o que una vaca dé a luz a un potro. Los hijos heredan de sus padres varios genes que determinan no solo la apariencia como la altura, el color de la piel y la forma del cabello, sino también la personalidad y las enfermedades. La duración de la vida también está relacionada con los genes heredados por los padres, de modo que los perros no pueden vivir tanto tiempo como los humanos viven en promedio

2) Las características son particularidades observables, o rasgos de un organismo, ya sean adquiridas o heredadas de los padres, como el color de los ojos y las habilidades académicas.

A través del Proyecto Genoma Humano3, un proyecto de investigación científica para conocer detalladamente el ADN humano, los científicos comenzaron a pensar que la duración de la vida de una persona también se dibuja en el mapa genético. Hasta hace décadas, se creía generalmente que el 80 % de la vida de un ser humano se decidía por el estilo de vida y el 20 % por los genes. Sin embargo, desde fines de la década de 1990, la explosión de resultados de la investigación que sugieren la existencia de los genes responsables de la longevidad comenzó a enfatizar factores genéticos.

3) Proyecto Genoma Humano: Genoma es una palabra compuesta por gen y cromosoma, que significa la información genética en general. El Proyecto Genoma Humano es un megaprograma científico internacional que forma el mapa genético humano descubriendo tres mil millones de bases del ADN humano y comprobando los genes en el ADN. Este proyecto comenzó en 1990 y terminó en 2003, pero muchas partes del mapa genético todavía permanecen en blanco. Cuando todos los espacios en blanco del mapa genético se llenen, será de gran ayuda para descubrir las causas de las enfermedades y prevenir o tratar enfermedades genéticas.

Una reciente investigación fue mucho más lejos y demostró que los factores genéticos tienen una influencia más grande en una larga duración de la vida que los factores ambientales. Según el informe de un equipo de investigación de la Facultad de Medicina Albert Einstein publicado en la revista de la Sociedad Gerontológica de Estados Unidos en agosto de 2011, se descubrieron tres genes comunes de longevidad en los genes de 500 judíos cuya edad promedio era de 100 años. Lo interesante es que un tercio de ellos tenía hábitos irrelevantes para una buena salud. Esto significa que los factores decisivos en la duración de la vida son los genes.

Todos los padres desearían transmitir a sus hijos genes de buena estatura, inteligencia, salud y longevidad si fuera posible, pero no pueden evitar dar solo los genes que poseen. Algunos nacen en una familia sana con genes de una vida larga y viven más de 100 años. Algunos llevan una vida dura, ya que heredan de sus padres enfermedades genéticas como el daltonismo o la hemofilia. Es por eso que muchos científicos están intentando sanar enfermedades mediante el estudio de los genes. No solo eso, sino que también están llevando a cabo investigaciones activas para retrasar el envejecimiento y prolongar la vida.

Sin embargo, parece que cientos de genes actúan simultáneamente para que una persona envejezca, así que no es nada fácil descubrir los mecanismos de envejecimiento. También es una tarea desafiante puesto que la velocidad de envejecimiento varía entre órganos o tejidos, e incluso dentro de los tejidos. Es imposible corregir todos los 100 billones de células del cuerpo a través de la modificación genética.

Según Leonard Hayflick, el fundador de la investigación del envejecimiento celular, las células no son infinitamente proliferantes, sino que tienen un cierto límite de vida. En su experimento de cultivo de células humanas, una célula embrionaria se detuvo después de dividirse cien veces, mientras que la célula de una persona anciana se dividió solo veinte veces. Hay un “reloj de vida” que mide nuestro tiempo en las células, por lo que la muerte es inevitable. Posteriormente, los biólogos celulares descubrieron los telómeros, conocidos por acortarse cada vez que las células se dividen. Este reloj de vida programado en el cuerpo no puede ir hacia atrás. Los seres vivos de esta tierra nacen con una vida limitada, envejecen y al final llegan a enfrentar la muerte.

El telómero, que se encuentra en el extremo del cromosoma, protege el ADN para que no se dañe y se reproduzca bien. Se acorta cada vez que la célula se divide. Cuando ha desaparecido por completo, la división celular termina y la célula muere. Por esta razón, el telómero es llamado “reloj de la vida” o “reloj del envejecimiento”. La parte brillante es un telómero.

La Biblia explica que la simiente de Dios está en los que son nacidos de Dios (1 Jn. 3:9). En otras palabras, Dios les dio la simiente de Dios, los genes de Dios. Aquellos que han heredado los genes de Dios llegan a ser hijos de Dios, y Dios llega a ser su Padre y su Madre. Dios tiene vida eterna, no una vida limitada. Entonces, ¿qué clase de vida tendrán los hijos de Dios? ¿Cuál es la forma de recibir los genes de la duración de vida de Dios, los genes de la vida eterna?